EL MOMENTO DE ASUN NOALES
Mejor Bailarina en los Premios Escénicos valencianos y presencia doble en el Festival Dansa València. La directora de OtraDanza vive intensamente estos dias. Nos lo cuenta…
Texto_OMAR KHAN Fotos_GERMÁN ANTÓN / LAURA ANTÓN
[Elche] 5 de noviembre de 2020
“Tengo 48 años y seré bailarina eternamente”, dice rotunda y feliz Asun Noales, directora y motor de OtraDanza, la compañía alicantina que fundó en 2007. “Eso lo pienso ahora pero el año pasado cuando hice Vigor Mortis me lo había planteado como una despedida de los escenarios. De hecho, es una obra que supone salir de una casa en la que has vivido, dejarlo todo”.
Ya había cambiado de parecer este lunes 2 de noviembre, cuando recibió el galardón a Mejor Bailarina en la gala de los Premios de las Artes Escénicas Valencianas 2020, lo que viene a reafirmarle que todavía le queda mucho escenario que pisar en los próximos años. “En un bailarín la edad importa, en un escritor o un pintor no tanto. Pierdes fisicalidad, hay cosas que tu cuerpo ya no pude hacer, es un hecho, pero también ganas en otras cosas. Me gusta crear pero también estar en el escenario”.
Vigor Mortis (foto superior), un dueto sobre el desasosiego, fue el gran triunfador en la noche de los premios valencianos. Aparte de destacar a Noales como intérprete, reconoció a su pareja escénica, al veterano Carlos Fernández, como Mejor Bailarín, y a Luis Crespo como Mejor Escenógrafo por la arquitectura de esta casa con vida propia, tercer protagonista de la coreografía. “Vigor Mortis trata de una casa que expulsa a los que la habitan, aborda la ansiedad de estar en un lugar que no te quiere. Son temas que ya están en otros trabajos de la compañía como Sacra o Rito… mis obras son eso, reflexiones sobre la naturaleza, el origen, la vida. No hago trabajos políticos, prefiero la trascendencia”.
Es obra muy personal Vigor Mortis. Suponía volver a un formato más pequeño, significaba reunirse al fin con Carlos Fernández, bailarín y amigo desde sus inicios en la danza, y sobre todo, reafirmarse a sí misma. “Quería hacer algo para mí. Fue un momento en que hubo cambios en la compañía y los aproveché para hacerme un regalo. Me sentía tranquila y segura, con ganas de estrenar y sentir el feedback del público. Estoy contenta y orgullosa”.
Doncella muerta
Coincide la triple premiación con su participación en el inminente Festival Dansa València por partida doble. El venidero miércoles 11 estrena allí Vigor Mortis y el sábado 14 La muerte y la doncella (foto sobre estas líneas), la pieza que creó por encargo para el Instituto Valenciano de Cultura (IVC). Ambas en el Teatro Rialto. “Si supiéramos cuánto tiempo nos queda, todo sería diferente”, reflexiona Noales a propósito de esta nueva creación, visualmente potente, que se centra en el tema de la muerte.
Inspirada en la obra homónima de Schubert, que intentaba recrear los sentimientos que invaden a una joven que es tentada por la muerte, Asun Noales construye toda una reflexión alrededor de la muerte echando mano a toda la simbología posible de un muro que parece ser frontera entre este mundo y el otro. El equilibro y complicidad entre la danza, la omnipresente escenografía de –otra vez- Luis Crespo y la exquisita música de Shubert, intervenida y manipulada apropiadamente por Telemann Rec, hacen de la pieza un todo indisociable de calculada belleza formal.
“El confinamiento me dio mucho tiempo para pensar y planificar lo que quería hacer. Me ha cogido en un momento bueno de mi carrera, en el que tengo mucha confianza y he podido contar con producción, con un estupendo equipo de artistas que han creído en mí”.
A su trabajo creativo se le suma el de gestora, el de incansable promotora de la danza. En el eje Elche-Alicante se mueve, y lleva media vida luchando por la difusión de la danza en ambas ciudades. En 2012 fundó el Festival Abril en Danza, hoy plenamente consolidado en su doble sede, al tiempo que sigue sosteniendo la actividad de su compañía OtraDanza, con la que se ha involucrado en proyectos tan ambiciosos como su versión libre de La consagración de la primavera, montada en alianza con la Joven Orquesta de la Genralitat Valenciana, en la celebración de su vigésimo aniversario, y que fue estrenada el año pasado en el Festival Sagunt a escena. “Quería energía vital, potencia física, que acabaran exhaustos, que el cansancio fuera la belleza de la obra. El bailarín cansado es el más honesto”, dice esta artista que de sus creaciones asegura convencida: “Siempre busco lo mismo, que las obras me queden como las que me gusta ver cuando voy como espectadora”.
ARTÍCULOS RELACIONADOS
https://susyq.es/actualidad/1100-33-festival-dansa-valencia / https://susyq.es/actualidad/1074-asun-noales-ivc