BIARRITZ DANZA
Hasta el próximo día 16 se estará celebrando una nueva edición del Festival Le Temps d’Aimer en esta ciudad del País Vasco francés y alrededores, que trae este año una importante representación española. Te lo contamos…
Texto_REDACCIÓN Foto_ALICE BLANGERO
Madrid, 05 de septiembre de 2024
Con la visión desenfadada y atrevida de un Don Quijote ideado por el coreógrafo taiwanés Po-Cheng Tsai para el Ballet de Berna, quedó inaugurada anoche en Biarritz la trigésimo cuarta edición del Festival Le Temps d’Aimer (Tiempos de amar), con dirección artística de Thierry Malandain, creador al frente del Centro Coreográfico Nacional de esta ciudad de País Vasco francés. Es así como hasta el próximo 16 de septiembre se darán cita las numerosas y atractivas compañías programadas, que actuarán en siete ciudades a uno y otro lado de nuestra frontera, teniendo como epicentro Biarritz.
Creado por iniciativa de Biarritz Cultura, el festival arranca en 1990 como un evento plural de la danza hasta que en 1998, con la creación del Ballet de Biarritz, su director Malandain se ocupa de la dirección artística que hasta día de hoy, sigue apostando por la pluralidad, abrazando distintas tendencias y estilos, pero con una marcada inclinación hacia la creación neoclásica, que se ha convertido en una de sus señas de identidad. Es el tipo de lenguaje que fascina al creador francés, que, por cierto, tiene previsto venir con su compañía en diciembre próximo a Teatros del Canal, de Madrid, con sus versiones de El pájaro de fuego y La consagración de la primavera.
Por lo pronto, dedica toda su energía a los próximos días de su festival, que permitirá disfrutar en Biarritz y ciudades aledañas de País Vasco, un arsenal de danza, en el que destacan compañías relevantes como, entre tantas otras, Los Ballets de Montecarlo, que bailarán la versión de La fierecilla domada, de Jean-Christophe Maillot (en la foto), (LA)HORDE Ballet Nacional de Marsella, con el mismo programa de coreógrafos contemporáneos que hace poco trajeron al madrileño Centro Condeduque y, en contraste, un creador contemporáneo de rabiosa actualidad como el portugués Marco Da Silva Ferreira, que bailará en distintos espacios públicos de las siete ciudades, donde también se han programado creaciones con lenguajes más contemporáneos como los de la española Aina Alegre, ahora al frente del Centro Coreográfico Nacional de Grenoble, Kukai Dantza, que dirige Jon Maya, en Errentería o Proyecto Larrua, de Vitoria-Gasteiz, quienes estrenan en este marco y en alianza con el Festival Dantza Hirian, su nueva creación de calle Sangre y clorofila, dirigida por sus directores Jordi Vilaseca y Aritz López.
Y es que la presencia vasca en particular y española en general siempre han cobrado protagonismo en Le Temps d’Aimer, y este año no es excepción. Con expectación, dado su arrollador éxito internacional, se espera Viva!, en la que Manuel Liñán asume con su equipo masculino las dificultades del rol femenino en el flamenco. En otro espectro de la creación, la compañía madrileña Kor’sia irrumpe en Biarritz con su reciente y visualmente sugerente creación Mont Ventoux, al tiempo que la compañía aragonesa Lamov llega con la versión de El lago de los cisnes, de su director Víctor Jiménez. El proyecto joven Dantzaz, de País Vasco, bailará su propuesta Distirak, y el creador emergente Akira Yoshida, navarro de origen japonés anclado en Barcelona, ofrecerá su solo Burial of the Bark.
