LOS QUE VUELVEN POR NAVIDAD
Hasta el 30 de diciembre se celebra en Santa Cruz la XVIII edición del Festival Canarios dentro y fuera, que lidera desde el Teatro Victoria Roberto Torres. Te contamos los orígenes…
Texto_OMAR KHAN Foto_MIGUEL BARRETO
Madrid, 28 de diciembre de 2019
La necesidad agudiza el ingenio. Hace ya 18 cálidos inviernos canarios que Roberto Torres, director del Teatro Victoria, de Santa Cruz de Tenerife, espacio emblemático para la danza local, analizaba la situación. La diáspora en masa de coreógrafos y bailarines era una realidad, principalmente porque no había posibilidad de formación en danza prácticamente en ninguna de las islas. Mucho menos de desarrollo profesional. Así que no eran pocos los artistas canarios regados por la península y el mundo que, unos con más y otros con menos suerte, estaban haciendo trayectoria y méritos fuera de casa. Como programador comprometido con la danza (también él es coreógrafo, bailarín y director de su propia compañía Nómada) sentía necesidad de mostrar en Tenerife los logros de todos estos artistas que, en su inmensa mayoría, habían iniciado sus carreras en el Victoria, el sitio que, desde 1992, viene acogiendo y arropando a todos los que bailan en las islas.
Quizá ensimismado escuchando por la tele el anuncio de turrón le sobrevino de repente la idea brillante. Por mucho éxito que tengan o por muy mal que vayan las cosas económicas, ellos vuelven, a casa vuelven, por Navidad. Los artistas de allí, como casi todos los canarios, tienen apego a la tierra. Y cada año, por estas fechas, a la cena familiar de Navidad no faltan. La coincidencia de tanto talento autóctono se da una vez al año y la posibilidad de actuar y mostrar su trabajo en casa, se las ha venido dando desde entonces Roberto Torres, que soñó con un festival que fuera una celebración de la danza hecha por nativos en cualquier parte del mundo. Nació así, el Festival Canarios dentro y fuera, que viene celebrando su décima octava edición desde el pasado jueves en Santa Cruz y se prolonga hasta el día 30 de diciembre, con una clausura festiva el 4 de enero en la Plaza de España, donde el Ballet de Patricia Monroy bailará su creación Mi querida Venezuela.
Claro que los tiempos han cambiado. Hoy ya existe un tejido de danza canaria y una más amplia comunidad. Pero sigue habiendo mucho canario fuera de casa aunque es creciente la cantidad que se queda. Por eso la agenda de esta nueva edición es tan apretada. Inauguró Lava, la novísima compañía del Auditorio de Tenerife, que dirige el hijo pródigo de la danza canaria Daniel Abreu, estrenando en este contexto su nueva pieza Abisal. Tras las funciones ayer de artistas como Daniel Morales, Flamencuría Obdulia Bustos, EnbeDanza y Carmen Macías, entre otros, hoy es el momento de Paula Quintana, que bailará su nuevo unipersonal Las alegrías (en la foto), y de compañías como Steam Room, MoBBAA, Abián Hernández y Sonia Rodríguez, que compartirán programa esta noche en el Teatro Victoria.
Para el fin de semana la agenda aparece repleta de funciones desde mediodía hasta la noche, con presentaciones en La Granja Espacio de Creación, el Parque García Sanabria o la Plaza Isla de la Madera, entre otros. Natalia Medina, Teresa Lorenzo, Rocío Pozo o Carmen Fumero son apenas algunos de los nombres que conforman esta maratón de talento canario, una cita ya arraigada en la oferta cultural de la ciudad, y también un tradicional punto de encuentro, emotivo y fraternal, entre los artistas que se han quedado y aquellos que vuelven, a casa vuelven, por Navidad.
