LUZ ARCAS INVOCA MUERTOS EN ITÁLICA
Estrenó ‘Tierras raras’ la semana pasada en Madrid y hoy, en el sevillano Festival de Itálica, vuelve con otro estreno, ‘Nana para Emmy Hennings’. Te lo contamos…
Texto_OMAR KHAN
Madrid, 07 de junio de 2025
Todavía resonando los aplausos que esta semana pasada consiguió por el estreno de su nueva creación Tierras raras, en el marco del Festival Madrid en Danza, Luz Arcas, directora de la compañía La Phármaco, vuelve a estar de estreno. Ésta vez será bajo el manto del Festival de Itálica sevillano, donde tendrá lugar esta noche la premier de Nana para Emmy Hennings, una pieza más bien artesanal, como ella la define, que tiene inspiración en un texto de la poetisa que fundó el legendario Cabaret Voltaire, en Zúrich, que fue el epicentro de las disruptivas actividades del movimiento Dadá a principios del siglo XX.
Además de Luz Arcas en el baile, conforman el equipo escénico de esta nueva creación que se verá hoy en el Cortijo del Cuarto, Inés Bacán, cantaora de Lebrija, y Enrique del Castillo, compositor que es artífice del umbráfono, una máquina capaz de convertir en sonidos los impulsos luminosos desde un lector óptico, que Arcas identifica, en sí mismo, como un generador de fantasmas.
Y es que, sin ser una propuesta de terror, Nana para Emmy Hennings tiene inspiración en los muertos. Su punto de partida está en Morphyne, un poema lisérgico de Hennings que hace referencia a los espíritus que vagan por las calles de Zúrich, que sirvió de inspiración a la cantaora Inés Bacán, que la adaptó para su repertorio a principios de este siglo, aún reconociendo que era un poema que no se entendía del todo. A su vez, sobre esta base, el dramaturgo Pedro G. Romero realizó la vídeo-creación La mesa que habla, a la que invitó a participar a Luz Arcas. De manera excepcional, la presentaron en vivo en París, Sevilla y el Museo Reina Sofía, de Madrid, entre otros.
Todos estos antecedentes han dado lugar a Nana para Emmy Hennings. No por casualidad, la obra guarda cierta relación con la también novísima Tierras raras, en la que Luz Arcas escarba en lo que hay debajo de la tierra, incluidos los muertos. “Tengo el mundo de los muertos presente desde que nací”, nos relata la creadora. “Me reservo mi opinión acerca de lo sobrenatural pero puedo decir que no me interesan los fantasmas ni las reencarnaciones, no soy espiritual en ese sentido. No creo ni en el limbo ni en el purgatorio. Para mí el mundo de los muertos es el presente”.
No obstante, el trabajo de Arcas ha venido últimamente indagando en el folcor y en lo popular, que abraza supersticiones y creencias. Evoca el ambiente que vivió en su pueblo malagueño durante su infancia. La mejor prueba de ello es su Trilogía de los Milagros, que se centra en estos recuerdos de lo popular y tradicional, tanto en su pueblo como en su casa. “Tengo una familia muy supersticiosa y en la paterna, había un abuelo espiritista que a mí me producía miedo. He tenido una relación muy viva con esto. La familia de mi madre no tanto, ellos son mucho más terrenales”.






