ROSAS FRESCAS
Más de 40 años median entre ‘Fase’, hoy en Valencia, y ‘EXIT ABOVE…’, el día 19 en Madrid, dos creaciones de Anne Teresa de Keersmaeker para su compañía Rosas, de las que hemos hablado con ella...
Texto_BEGOÑA DONAT Foto_ ANNE VAN AERSCHOT
Madrid, 04 de mayo de 2024
Anne Teresa De Keersmaeker (Mechelen, Bèlgica, 1960), la legendaria directora de la compañía belga Rosas, es historia viva y latente de la danza. Esta noche, en Valencia (Teatro Principal), la audiencia puede apreciar lo que fue y significó su minimalista debut y, en Madrid (Teatros del Canal, 19 de mayo) la vocación coral de su último espectáculo, separados ambos por más de cuatro décadas. El valenciano Festival 10 Sentidos, de Valencia, acoge hoy la seminal Fase, Four Movements to the Music of Steve Reich, de 1982 [en la foto] , conformada por tres dúos y un solo coreografiados sobre cuatro repetitivas composiciones, mientras que Canal, en el marco del Festival Madrid en Danza, ha programado EXIT ABOVE – After The Tempest, montada por ella el año pasado sobre música blues.
¿Qué sentimiento le provoca que ahora Fase, sea interpretada por una nueva generación de bailarinas?
Ha sido, por supuesto, un reto, pero también resultaba necesario. Era un desafío comprobar si la escritura coreográfica resistía por sí misma. Esta pieza se hizo hace más de 42 años, así que es hermoso ver cómo se mantiene frente al paso del tiempo. Del conjunto, la parte más delicada era el solo Violin Phase, porque está conectado a mi propio movimiento en ese momento de mi vida y de mi trayectoria, de modo que cederlo hace ya seis años fue lo más difícil. De hecho, todavía bailo este solo de la pieza de vez en cuando.
¿Cómo prepara a los artistas que toman el relevo?
Es muy importante señalar que no consiste en imitar, sino en personificar. Les expliqué de una manera muy técnica los detalles de las decisiones que tomé respecto al origen del movimiento, que son una combinación del acercamiento al material desde muchos ángulos diferentes.
¿Cómo consiguió entonces esta rara mezcla de rigor y anarquía, de simplicidad y complejidad?
Fue al principio de mi carrera. No tenía destreza como coreógrafa y estaba fascinada por el minimalismo, tanto en la música como en la arquitectura y las bellas artes. Adopté la música, de hecho, como directriz. Quería crear de una forma muy cercana a mi cuerpo, así que empecé con pequeños pasos que repetía hasta el infinito, en coherencia con una lógica matemática racional, intelectual. Trabajaba con la repetición de patrones, con la música como proceso. La manera en la que Steve Reich construía su música me sirvió de inspiración, porque encontré un sistema para organizar el tiempo y el espacio y después lo traduje a la escritura coreográfica. Aquel fue mi comienzo como coreógrafa, así que iba muy lenta en la generación de un vocabulario y de mi movimiento, paso a paso, capa a capa.
En una entrevista reciente comparaba aquella coreografía con lo que un niño hace cuando se les pide que bailen. ¿Fue la infancia una fuente de inspiración?
No, se trató de un análisis que hice después de estrenar la pieza. En la búsqueda de un movimiento propio, seguí mi intuición y mi intelecto, pero no me paré a estudiar mi trabajo hasta después. Fue entonces cuando me di cuenta de las similitudes con los actos que realizan los críos cuando les pides que bailen, como girar, saltar y, quizás, saludar con las manos. Básicamente, se trata de recargar energías en los planos de la vertical y la horizontal. En muchos bailes populares sucede lo mismo: las comunidades dan vueltas y brincan tanto en grupo como en solitario. Si comparas la verticalidad de nuestra espina dorsal con la horizontalidad de la de los animales, se trata de una postura básica de la condición humana. Así que es como recargar esta antena entre el cielo y la tierra, y despertar.
¿Qué peso tiene el balanceo de los brazos en sus creaciones?
Soy diestra y he sobrecargado los brazos, cuyo uso está ligado a la fuerza de voluntad, pero también tengo fuerza en el tren inferior. Lo cierto es que al principio me serví mucho de los brazos y de la parte superior del cuerpo.
Se da la coincidencia de que también hace unos días ha traído a Sevilla y llevará luego a Madrid EXIT ABOVE... su última creación [en la foto] ¿Qué aspectos conectan a ambas piezas?
Son dos obras muy diferentes entre sí, hay muchos aspectos formales opuestos entre ambas. El desencadenante de Fase, por ejemplo, fue muy abstracto y es una pieza que bailaba yo misma, mientras que EXIT ABOVE… surgió del trabajo del elenco de bailarines. Esta es una coreografía grupal, mientras que mi debut se concibió para dos bailarinas. Fase se sirve de la música minimalista de Steve Reich y es un proceso muy riguroso, en el que la esteructura de la música te da libertad. En EXIT ABOVE…, en cambio, la música es blues interpretado por Jean-Marie Aerts, Meskerem Mees y Carlos Garbin.
Así y todo, imagino, que habrá constantes en ambos trabajos que podrán considerarse marca de la casa, como los patrones geométricos y la música como aliada.
Efectivamente, muchas cosas permanecen, pero el mundo ha cambiado a lo largo de estas cuatro décadas, como también lo he hecho yo. Llevo trabajando 45 años y he hecho 65 piezas. En el último decenio las artes visuales se han vuelto muy importantes en mi trabajo, aunque han estado desde el principio, tanto en la organización del espacio como en el trabajo con la iluminación y el vestuario.
¿Encuentra inspiración de manera indistinta en músicos, artistas visuales y coreógrafos?.
Sí, hay gente a la que admiro en las tres disciplinas, pero también me inspira mucho la observación de la naturaleza.
¿Siente el respeto a sus orbas por parte de las nuevas generaciones?
Estoy en contacto con ellas a través mi trabajo. Podría ser la madre e incluso la abuela de algunos de mis bailarines de hoy y tenemos una escuela [P.A.R.T.S. en Bruseñas], así que este intercambio está muy presente en mi vida y en mi carrera.
¿Y aprecia un flujo de conocimiento recíproco?
Por supuesto. Su manera de mirar el mundo es diferente. Internet ha cambiado mucho las cosas. La vida se ha vuelto y se está volviendo cada día más compleja, así que no es fácil, plantea una gran cantidad de retos, como también de oportunidades.
¿Cómo traduce esa realidad contemporánea en sus creaciones?
Has de combinar, por un lado, la concentración, el foco y la cercanía, y por otro, la perspectiva y conocimientos de hoy.
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