JOSEPHINE BAKER ASCIENDE AL OLIMPO FRANCÉS
En noviembre próximo la Venus de Ébano ingresará al Panteón de París, siendo la sexta mujer y la primera negra en entrar al cementerio más famoso del mundo. Te lo contamos...
Texto_REDACCIÓN
Madrid, 24 de agosto de 2021
Aunque su cuerpo permanecerá enterrado en Mónaco, el próximo 30 de noviembre Josephine Baker (Misuri, 1906- París, 1975) pasará a ser la sexta mujer y la primera negra destacada en el Panteón de París, donde reposan ochenta grandes personalidades de la cultura francesa, según anunció el presidente Emanuel Macron ayer en un tuit, en el que destacó que la cantante y bailarina francesa “llevó en alto el lema de la República Francesa”, en alusión a su trabajo en la resistencia frente a la ocupación nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Célebre como artista, con sus canciones seductoras y su baile sensual e inigualable (fue la reina del susyQ, el famoso paso de charlestón que da nombre a nuestra revista, haciéndolo en la foto superior), también fue una activista en varios frentes, incluido principalmente el racismo, interviniendo en la famosa Gran Marcha de Washington, en 1963, junto a Martin Luther King, a la que acudió en uniforme militar y luciendo sus medallas de guerra. La distinción a la artista franco-norteamericana destaca también que “fue la primera estrella internacional negra en el mundo del espectáculo y musa de los artistas cubistas”.
Decisión presidencial
El Panteón de París, un edificio ubicado en el entorno de la Universidad de la Sorbona, es uno de los camposantos más célebres del mundo. Su selecto club de inquilinos, al que se accede exclusivamente por decreto presidencial, incluye a luminarias como Jean-Jacques Russeau, Alejandro Dumas o Marie Curie, una de las pocas mujeres seleccionadas.
Su nueva inquilina, la llamada Venus de Ébano, obtuvo la Medalla de la Resistencia, la Cruz de Guerra y la Orden Nacional de la Legión de Honor por su ayuda a la resistencia contra los nazis y en Estados Unidos, donde nació, se negó a actuar para un público segregado. Acciones todas, quizá junto a su condición de artista bisexual que nunca hizo pública (se le atribuyen romances con la escritora Colette y la pintora mexicana Frida Kahlo), que la hicieron célebre como férrea luchadora por los derechos civiles tanto en Europa como en Norteamérica.
Se radicó en Francia con apenas 19 años y en París estrenó La Revue Nègre, un musical que contribuyó a dar visibilidad a la cultura negra y la difusión del jazz en Europa, en el que aparecía con su célebre y mínima faldita hecha de plátanos. Fue vedette estrella del Folies Bergère, donde actuó acompañada por un leopardo, y luego abrió su propio club, Chez Josephine. Luchó por demostrar que niños de diferentes culturas, razas y religiones podían convivir, adoptando más una docena de pequeños procedentes de Marruecos, Finlandia, Colombia, Argelia o Venezuela, a los que ella misma llamaba “la tribu del arcoíris”.
A los 68 años después de haber celebrado con un éxito rotundo sus 50 años de escenario, murió de una hemorragia cerebral en abril de 1975 en París. Quizá por su amistad personal con Grace Kelly, sus restos terminaron descansando en Mónaco, donde permanecerán a pesar de la distinción francesa, según reveló uno de sus hijos.