BAILA BILBAO
El Festival Dantzaldia arranca esta noche y mantiene su oferta de danza hasta diciembre. Te contamos lo que se bailará en su nueva edición…
Teto_ALBA ANZOLA
Madrid, 24 de septiembre de 2020
Son tiempos difíciles para la danza. Pero desde La Fundición han querido solidarizarse con los artistas y colocarse bajo el lema La cultura es segura poniendo en marcha, contra viento y pandemia, una nueva edición del Festival Dantzaldia, el más relevante dedicado a la danza en Bilbao, que esta noche queda inaugurado con la presentación de la Compañía Metamorphosis, primer espectáculo de un atractivo cartel que ofertará danza hasta el 18 de diciembre, día que clausura con un festín de delirantes piezas cortas de calle, en el Edificio Ensanche.
Esta noche es especial para la creadora y bailarina vasca Iratxe Ansa, que dirige Metamorphosis a cuatro manos con Igor Bacovich (en la foto de Alfredo Martín, bajo estas líneas). Mostrará en su tierra el dueto Entangled Echoes, representativo del exigente trabajo físico y al tiempo extremadamente lírico, que ha venido desarrollando con su compañía, que se prepara a estrenar el miércoles de la próxima semana en Teatros del Canal, de Madrid, su nueva creación Elkarrizketa Ilunak, justamente de inspiración vasca.
Dantzaldia, desde hace ya tiempo, ha mostrado su debilidad por las bailaoras que arriesgan, rompen y rasgan desde el flamenco. Este año no es menos, y en su cartel brillan dos talentos de vanguardia: Leonor Leal, con Nocturno (18 de octubre), obra para bailarse de noche, concebida en el laboratorio catalán L’animal a l’esquena y asesorada directamente por María Muñoz, de Mal Pelo, y Ana Morales, que romperá el silencio habitual del Museo Guggenheim con su propuesta personalísima Suite: Sin permiso (21 de noviembre), en la que revisa la relación con su padre.
Novia candiense
La oferta internacional estará focalizada en Dinis Machado, controvertido artista portugués estrenando Consubstantiation (26 y 27 de septiembre, en la foto que abre este reportaje), una atrevida performance sobre género, identidad sexual y estado intermedio, que ataca la superficialidad y banalidad en que se han convertido los entornos queer/drag. Y ubicados en otro extremo, con una oferta abierta a niños y mayores, la compañía francesa Wang-Ramírez presentará a ritmo hip hop el dueto W.A.M. We are monchichi (19 de diciembre).
De la vieja escuela vanguardista nacional, que tanto ha sido apoyada desde Dantzaldia, rescatan a Elena Córdoba, artista radical que rompía convencionalismos en el recatado Madrid de los noventa, con una pieza nueva de elocuente título: El nacimiento de una bailarina vieja (12 y 13 de diciembre).
Para todo bilbaíno que sienta temor, terror, recelo, desconfianza, aversión o indiferencia por la danza contemporánea (sin excluir ni marginar a los otros, los sensibles, curiosos, amigos y fanáticos), Dantzaldia les trae a un artista/docente capaz de hacer que cualquier ser vivo se enamore y se conmueva con la danza: Toni Jodar, creador catalán que tiene en su cuerpo toda la danza de la historia de la danza. Así lo demostrará en esta ocasión especial que reúne en una jornada las dos partes de su espectáculo a modo de conferencia bailada Explica Dansa I & II (3 de diciembre).
Finalmente, destacar que Dantzaldia, con su sensibilidad, olfato y buen gusto, se ha echado novia en Canadá, alimentando así el Memorando de Entendimiento Euskadi-Quebec que propicia este intercambio cultural entre Bilbao y Montreal. Es así como del 24 al 27 de noviembre, un trocito del Festival Quartiers Danses irrumpirá en Bilbao con una selección de vídeocreaciones y la presentación de un doble programa por parte del colectivo muldisciplinar TTLF-Kyra Jean Green (Trip The Light Fantastic), que estrenará The man who traveled nowhere in time y The Smile Club, que se inspira en 1930, el año en que Budapest ganó el título de “ciudad de los suicidios”. En otoño de 2021, serán creadores vascos los que se colarán en la programación de Quertier Danses.
